Abrocharos el cinturón y reclinad la bandeja que despegamos con un post de altos vuelos cinematográficos. Aprovechando que esta semana se ha estrenado Non Stop en España, quería reflexionar un poco sobre las películas que transcurren estrictamente en aviones. Pero antes de nada hablemos de este estreno que por lo que parece ha sido número uno en USA.
Liam Neeson protagoniza una historia donde encarna a un policía de avión, ya sabéis los que hacen ver que son pasajeros y llevan una pistola para casos de emergencia. Pues bien el personaje principal no es más que un policía traumado por varias calamidades que le han ido sucediendo y como consecuencia se volvió un paranoico y un alcohólico. En un vuelo non stop de Nueva York a Londres ocurre algo muy inesperado. A través de la frecuencia federal reservada para los agentes y pilotos de avión, nuestro protagonista recibe una serie de mensajes en su móvil que lo dejarán perplejo: “si en 20 minutos no se transfieren 150 millones a una cuenta morirá una persona de este avión. Y así cada 20 minutos hasta que esté hecha la transferencia”. Es una película para volverse paranoico intentando descubrir al autor de estas amenazas. De verdad que podéis estar muy alerta durante la película y analizarlo todo con mucho cuidado, pero no os servirá de nada. El final para mí, es muy indiferente. Te imaginas que te van a sorprender con el malo de la peli pero da bastante igual la verdad. En esta película vemos también a la gran Julianne Moore, que se sentará junto a nuestro protagonista en clase business.
Si queréis saber mi opinión le doy un 6 y creo que soy muy generosos. Personalmente creo que hay películas muy buenas que ocurren en aviones que están a años luz de Non Stop. Una de mis favoritas es Plan de Vuelo: Desaparecida. Protagonizada por la gran Jodie Foster, veremos una historia donde dudaremos totalmente de lo que estamos viendo.
Kyle Pratt es una mujer que acaba de perder a su marido y que debe trasladar el cuerpo en avión hasta el lugar del entierro. En el avión le acompañará su hija pequeña Julia de 6 años. Cuando ambas suben al avión y este despega, ocurrirá lo inesperado: Julia desaparecerá. Pero lo peor de todo es que nadie en el avión afirma haber visto a la niña dejando a la supuesta madre como una lunática. Pero nuestra protagonista sigue pensando que su hija existe y que ha subido con ella al avión y hará lo que sea necesario para recuperarla. Este sí que es un buen ejemplo de una buena trama desarrollada en un avión. Misterio, suspense, ambigüedades y confusión. Apuesto lo que queráis a que vosotros mismos dudaréis si lo que está pasando es verdad o mentira.
Apuntad Plan de Vuelo: Desaparecida para ver una de esas noches o tardes muertas. Non Stop dejad que siga volando e id a ver otra película. Y ya está, hemos llegado al destino esperamos que hayáis disfrutado del viaje. Si tenéis alguna recomendación de películas que transcurren en aviones dejadnos un comentario ; )