Me encanta la versión americana de Top Chef. No es que la versión española no me guste, pero encuentro que es mucho más aburrida que el programa americano.
Y como casi todos ya sabéis de qué va, vamos a lo divertido. En cada temporada siempre hay participantes que parece que no hayan visto ningún capítulo anterior. Por ejemplo, ¿a quién se le ocurre comprar pasta seca en un supermercado? O haces tu la pasta o haces otra cosa. Es de cajón.
Si alguno de vosotros os atrevéis a participar en el concurso de Top Chef, aquí tenéis una ayuda que quizás os ayudará ganar.
Aquí tenéis los pasos a seguir para que te echen de Top Chef:
1. Usar aceite de trufa
Hace ocho años, el aceite de trufa era el ingrediente perfecto para darle un toque “de lujo” a tu comida. Algunos chefs abusaron mucho y por ello, ahora muchos lo ven como la peste. Sobre todo los jueces de Top Chef.
2. Hacer Risotto
Muchísimos concursantes han sido “sacrificados” por haber intentado hacer un buen risotto. Es uno de los platos más difíciles de hacer porque mucha gente no sabe ni como debería ser un buen risotto. A algunos les gusta más al dente, otros muy pegajoso e incluso diría que los chefs también tienen visiones diferentes sobre como debería cocinarse. Así que no os la juguéis.
3. Sacar el kit de gastronomía molecular
No sé si a los jueces les gusta que los concursantes jueguen con todo el rollo molecular porque casi siempre que alguien coge lecitina de soja, lo acaban echando. Lo mismo pasa con los que intentan hacer un polvo, arena o algo congelado. Me imagino a los jueces pensando “Anda, has convertido esta sabrosa salsa en unos polvitos que podría inhalar sin querer. Qué truco más guay”. </sarcasmo>
4. Hacer algo con espuma
Marcel Vigneron, concursante de la segunda temporada de Top chef, era el rey de hacer espumas y mousses raros. Y él pudo llegar hasta la final pero no ganó porque su plato tenía unas burbujitas muy poco apetecibles. Además, ¿a quién conoces que pida un plato con espuma?
5. Hacer dos platos, tres o cuatro
Si te piden hacer un plato, no te van a dar más puntos por hacer 2, 3 o 4. De hecho, cuantos más platos hagas, más posibilidades tienes de hacer algo mal. Muchas veces los jueces no saben qué decir cuando han probado 10 platos ricos y un mini detalle puede enviarte a casa.
6. Añadir dulces en platos salados u otras florituras
¿Has hecho confit de pato salado con vainilla, nueces de macadamia y caramelo? Suena muy raro. Los jueces te van a juzgar ya desde el primer momento que oigan el nombre de tu plato. Si suena como una mierda, seguramente seguirán pensándolo después de probarlo. No hagáis cosas que suene poco apetecibles, va.
7. Ser el capitán en “Restaurant Wars”
Hacia el final de todas las temporadas, hacen una guerra de restaurantes. Los concursantes tienen que montar un restaurante en 24h: su carta, logo, decoración y todos los platos. Se hacen dos grupos y se crean dos restaurantes diferentes. Pero cada equipo necesita un líder y casi siempre se va a casa el líder del equipo perdedor.
8. Defender tu plato a muerte
Tengo que confesar que uno de mis momentos favoritos del programa es cuando los jueces están 15 minutos diciéndole al chef todos los motivos de por qué han odiado su plato. Y cuando por fin dejan al concursante hablar, defiende su plato.
Eso es que no ha visto como se pone Padma Lakshmi cuando le llevan la contraria.
9. Cocinar algo demasiado sano
En las primeras temporadas siempre habían concursantes que defendían los platos sanos a muerte. Y los preparaban cuando los jueces les pedían que hicieran un plato que te haga sentir como en casa (normalmente es sinónimo de hacer algo frito, con mantequilla, queso, barbacoa o cualquier otra cosa gorda americana). Nunca duraban más de 3 capítulos. No es que no esté bien hacer cosas sanas, pero no es el programa indicado para hacerlo. ¡Tom Colicchio tiene una cadena de asadores! ¿Qué va a hacer con una sopa de brocoli?
10. Entrar en el concurso sin experiencia haciendo postres
No entiendo a los concursantes que entran en el concurso sin haber hecho cosas fuera de su especialización. Entiendo que todos son cocineros que trabajan duro y quizás no tienen mucho tiempo libre pero deberían de practicar antes.
A todos les toca hacer postres en algún momento del concurso. Y aunque no les guste hacer postres (porque esa suele ser la excusa), tendrían que ir más preparados.
Y eso es todo. No hace falta seguir todas estas reglas para ganar el concurso, pero todos deberían de tenerlas en cuenta.