Hace poco que hablamos del inicio de la segunda temporada de Orange Is The New Black, pero estoy pasando el verano en los Estados Unidos, y tengo Netflix en mi casa. Error fatal, pues Netflix ha puesto a disposición de sus usuarios todos los capítulos de la nueva entrega. Vamos, que ya he terminado la temporada. ¡La gran y genial segunda temporada!
Aquí todo el mundo es fan de Orange Is The New Black, e incluso he visto camisetas con frases de la serie. La fiebre de Breaking Bad es mayor, pero dale tiempo al tiempo. Echadle un vistazo a esta CAMISETA DE ORANGE IS THE NEW BLACK que he visto en una de mis tiendas favoritas de aquí; Hot Topic.
No sé si habéis empezado la nueva temporada, o si conocéis si quiera la serie. Sea lo que sea lo que os haya traído a este artículo, tenéis que ver los trailers de ambas entregas.
En nuestro más reciente artículo de la serie, que podéis leer si clisáis AQUÍ, hablamos de lo que iba a aparecer en esta nueva temporada; los personajes nuevos, las alianzas y todos los grandes sucesos que iban a tener lugar en la cárcel, más allá del “universo Piper” que definía la primera temporada. Es hora, pues, de decir qué nos ha parecido el desarrollo de estos hechos.
¡ALERTA SPOILER!
Hablemos claro, Piper (Taylor Schilling) nos cargaba un poco en la primera temporada, y en esta segunda nos ha gustado más…pero en la cárcel siguen habiendo mil y un personajes mucho más interesantes que ella. De esto se ha tratado la segunda temporada. Han conseguido que la serie deje de estar centrada en Piper y han creado algo mucho más coral, donde todas las historias de todas las presas se mezclan para despertar un gran interés en nosotros.
Como siempre, hemos podido ver el pasado de muchas de las presas, y eso nos ha acercado más a ellas, aún no siendo cruciales para las tramas que hasta entonces habíamos visto. Hemos conocido el pasado de Crazy Eyes (Uzo Aduba), Taystee (Danielle Brooks) y Poussey (Samira Wiley), entre otras de las que ya eran importantes hasta el momento. También hemos descubierto una parte horriblemente triste de Morello (Yael Stone), la persona más buena e inocente de toda la cárcel. Para mí ha sido una de las historias más tristes; en la cárcel con órdenes de alejamiento por acosar a un tipo que, nosotros creíamos que era su prometido, pero que sólo la conoció y la dejó obsesionada y psicópata perdida. No sólo engañó a sus compañeras de cárcel, nos engañó a todos.
Y las dos revelaciones de esta temporada han sido, para mi, Rosa (Barbara Rosenblat) y Gloria (Selenis Leyva). Rosa se metió en la primera temporada sin llamar mucho la atención, con ese acento de gángster hispánico (creéroslo, me lo ha dicho un americano), con ese pasado de ladrona de bancos maldita, pues todos los hombres a los que quiere acaban muriendo repentinamente. Y Gloria, ha supuesto la cabecilla del grupo de las latinas, que también da mucho juego en la serie. Ella ha tenido la típica historia de violencia de género, sólo que Orange is the new black ha conseguido lo que otros no; hacer que sea una historia genuina y creíble.
De lo mejor de la temporada; han conseguido crear a un “malo” mucho peor que cualquier carcelario bigotudo, que no ha despertado ningún tipo de empatía en ninguno de nosotros. Hablo de Vee (Lorraine Toussaint). La abeja reina, la viuda negra de la cárcel. Se ha pasado toda la temporada envenenando a las chicas, pero no ha podido engañar a Poussey (una de mis favoritas esta temporada). Ha habido otras malas personas en la cárcel, como Pennsatucky (Taryn Manning) y Mendez (Pablo Schreiber), pero siempre han sido ese tipo de “villano” hacia el que de alguna manera sientes cierto cariño. O si no es empatía, es fascinación, pero nos gusta verlos en pantalla, aunque eso suponga algo malo para los otros personajes. Pero Vee era odiosa hasta la saciedad, no le gustaba a nadie y por eso ha sido tan satisfactoria su muerte; porque, igual que todas las demás reclusas (menos para la pobre de Crazy Eyes), para nosotros Vee era una mala hierba que tenía que desaparecer de esa cárcel. No obstante, ha sido ella la que ha creado esa rivalidad que tanto nos ha gustado, y que ha convertido el show en una serie coral. El grupo de las negras que venden droga encabezadas por Vee, el grupo de las blancas que controlan todo tipo de contrabando desde el invernadero, y el grupo de las latinas que se encargan de la cocina, que están en medio, pero no participan en ningún equipo. A todo esto, súmale a los carceleros, que en esta temporada han sido mucho más duros, debido a las órdenes de la corrupta (ex) alcaide Figueroa (Alysia Reiner).
Piper ha seguido teniendo un protagonismo por encima de las demás, ¡pero por eso está basada en su personaje toda la serie! Ha estado muy sola, con su mejor amiga y su prometido, Larry (Jason Biggs), engañándole a sus espaldas, y con Alex (Laura Prepon) guardada en el rincón más negro de su odio. Incluso Crazy Eyes le ha dado la espalda esta temporada. Pero al menos ha tenido ese proyecto tapadera del periódico de la cárcel, que finalmente ha terminado con la búsqueda de los archivos que demostraban la malversación de dinero de Figueroa, y la han salvado de un traslado traumático a una cárcel de Virginia. En fin, que la pobre no lo ha tenido nada fácil. De todos los personajes puede que Piper sea la que más ha evolucionado hasta el momento, y lo hemos visto gracias a la nueva presa Soso (Kimiko Glenn), que nos recuerda a ella al principio; asustada y sin aliados que la protejan. Ahora Piper es uno más de los depredadores y, aunque va a su bola, nadie quiere meterse con ella.
Me ha gustado todo en esta temporada; las tramas, y sobretodo la estructura, que ha sido clave para el desarrollo y evolución de la serie. El comienzo; un capítulo dedicado enteramente a Piper, en el que nos meten en un avión en mitad de la noche, sin decirnos hacia donde nos dirigimos. El final; la muerte de Vee como conclusión de una lucha interminable por parte de todos. Vee le da la peor de las puñaladas por la espalda a Red (Kate Mulgrew), que va al hospital con la cara desfigurada. Las protegidas de Red quieren vengarse, y es precisamente Gloria la que ayuda a que eso pase, realizando un mal de ojo, o vete tu a saber qué es, con unos polvos, unos pelos de perro y algo cocinado con huevos. Luego, la persistencia de Poussey para recuperar a Taystee es lo que hace que finalmente todas las súbditas de Vee decidan volverse contra ella. Y por último, y lo mejor de todo, Rosa. A Rosa le dan de tres a seis semanas de vida, y Morello (quiero creer que motivada por la charla que Piper le da unas escenas antes, en la que le dice que fue la primera persona que fue amable con ella) le da la furgoneta en un momento de descuido por parte de los agentes, para que huya y no muera en la cárcel. Vee aprovecha el túnel que conecta el invernadero de Red con el exterior para huir (puesto que ya no tiene súbditas) y es atropellada (a drede, me encanta) por Rosa, que la ve en un lado de la carretera cuando ambas han dejado atrás la cárcel. ¿Podría haber sido mejor? Yo creo que no.
¿Lo único malo de todo esto? Me queda un año entero hasta poder ver la siguiente temporada, o eso me parece. A menos que sea de esas series que renuevan temporada a los seis meses. Recemos para que así sea.