Just So Happens es la novela gráfica que Fumio Obata publicó en 2014, y su historia puede que sea igual que la tuya y la mía. En un contexto en el que todos los jóvenes somos unos eternos emigrantes e inmigrantes, cuya casa no es más que los huesos que sujetan nuestro cuerpo, Just So Happens se convierte en el reflejo de nosotros mismos, de nuestros sentimientos y de ese vacío existencial que es, a veces, tan bonito.
¿De qué trata?
Just So Happens es la historia de Yumiko, una joven diseñadora gráfica nacida en Japón que lleva viviendo unos años en la ciudad de Londres. Un tema familiar hará que tenga que regresar a Japón por unos días y, la búsqueda de su identidad, que parecía más clara, se emborrona, haciendo que en la cabeza de Yumiko no haya más que un caos sin resolver. ¿Cómo soy? ¿A qué pertenezco? ¿Qué es lo que quiero? Esas son las preguntas que se hace ella y te harás tu también.
Para mí, las novelas gráficas con protagonistas que tienen problemas existenciales, que se refieren más a la mente que a lo que pasa a su alrededor, no tienen nada que envidiarle a las demás (esto es subjetivo, hablo de mis gustos). Ese ritmo pausado, relajado y que deja páginas y páginas dedicadas a la observación de los dibujos es, simplemente, lo mejor. Es más, dan más margen a la creatividad por parte de los ilustradores. ¿No creéis?
Para los curiosos, la historia que se cuenta en esta novela gráfica ya fue utilizada en el 2010 por el autor en forma de una novela grafica corta titulada Going Back. Más tarde, ésta plantaría la semilla de lo que sería Just So Happens.
El estilo de dibujo
Fumio es más expresivo que realista en esta historia, con un uso del color muy instintivo, poniendo en relieve lo que es importante en cada página. El estilo también es fresco, pues no pretende ser perfecto (¿no es, lo imperfecto, mucho mejor?) ni extremadamente detallado. El recurrir a la pesadez de la mente y de la imaginación da a Fumio margen para ser más abstracto y reflexivo, anteponiendo muchas veces las ensoñaciones y los paisajes estáticos a las situaciones reales y del momento.
Fumio Obata, el autor
Más allá de la ficción, Fumio Obata también nació en Japón y pronto se fue a estudiar a Londres quedándose allí indefinidamente. Es un artista visual, ilustrador y diseñador, y su comic y estilo beben mucho de la novela gráfica francesa. Todo este mejunje de culturas sólo puede ser bueno. De este modo, Just So Happens tiene mucho de experiencia personal y por eso es tan auténtica y honesta.
Ah, y Fumio también es animador. Aquí os dejo uno de sus trabajos, cuyo estilo no dista mucho del de la novela gráfica de la que estamos hablando aquí.
Just So Happens es, entonces, un delicado recorrido por la mente de Yumiko, con la que nos podríamos identificar todos, por la universalidad del sentimiento que ésta plasma en las páginas de colores cálidos y pinceladas relajadas. Creo que deberías leerlo.