Las series de TV pueden influenciar a la gente, tanto como hasta incluso a la hora de escoger carreras universitarias. ¿Creéis que desde la creación de Scrubs, House o Anatomía de Grey hay más alumnos de medicina? ¿Creéis que los abogados que aparecen en Ally Mcbeal, Law and Order o Drop Dead Diva han afectado a la manera de trabajar en el sistema judicial? Vamos a ver qué dicen los estudios que hemos encontrado…
CSI
En 2008, el Telegraph escribió un artículo que decía que en los últimos 10 años habían incrementado un 70% los alumnos en carreras de ciencias forenses. Muchos deciden dedicarse a este sector porque creen que es parecido a lo que ven en las series. El problema está cuando se dan cuenta de que es mucho más duro de lo que parece.
Además, según The Economist, esta serie no solo ha afectado a los estudios universitarios, sino también a los miembros del jurado, fiscales, abogados defensores y… ¡hasta a criminales!
Miembros del jurado:
Los miembros del jurado tienen expectativas poco realistas de pruebas forenses y las técnicas de investigación. De hecho, Evan Durnal (investigador Americano del departamento de justicia criminal la Universidad Central de Missouri) tiene pruebas de que las series sobre ciencias forenses los han afectado a la hora de tomar decisiones sobre un caso. Y sobre todo, piden más datos sobre el ADN (como por ejemplo, “¿por qué no han mirado en las uñas si habían restos de ADN?”) o pruebas que creen que deberían de estar presentes sí o sí.
De hecho, en Estados Unidos tardan más en escoger miembros del jurado para garantizar escoger a aquellos que no estén influenciados por lo que ven en las series.
Fiscales y Abogados defensores:
Es frustrante para ellos ya que tienen que convencer a un jurado que cree saberlo todo sobre las ciencias forenses pero los abogados defensores también se aprovechan y utilizan este fenómeno para ganar sus casos (por ejemplo, con la idea de “si no hay ADN, cómo van a culpar a su cliente”).
Científicos:
Los científicos no trabajan con datos absolutamente seguros, sino con probabilidades y la manera que calculan estas probabilidades es muy compleja. Por ejemplo, cuando testifican en un juicio, un experto en huellas dactilares puede decir que hay 90% de probabilidades de que coincida con el acusado si dejó una marca pero 1 en un billón si encuentran la marca de otra persona. Por lo tanto, son pruebas que pueden tardar mucho más de lo necesario para el juicio.
Criminales:
Ellos también ven series y hay pruebas de que eso también ha afectado en maneras de actuar a la hora de cometer un crimen. Por ejemplo, se sabe que la lejía borra el ADN (y sino, ahora ya lo sabes) y por lo tanto, los asesinos lo utilizan mucho más ahora. También se utilizan más los guantes para no dejar huellas y los sobres que llevan cinta adhesiva.
Big Bang Theory y los documentales de Brian Cox
En The Guardian, comentan que el “boom” ha provocado que en Inglaterra, por ejemplo, haya aumentado en un 20% el número de estudiantes preuniversitarios matriculados en cursos preparatorios de Física y Química (el llamado A-level) y los de Matemáticas subieron un 40%. ¡Y eso que han subido las matrículas universitarias en Inglaterra (más caras que nunca)!
Los motivos por el éxito de estas carreras son por Brian Cox, el Gran Colisionador de Hadrones (LHC en inglés) y The Big Bang Theory
El Gran Colisionador de Hadrones:
En los últimos años ha dado mucho que hablar y es un lugar donde se están haciendo los descubrimientos punteros sobre física de partículas. Al estar tan cerca de CERN (la organización europea de investigación nuclear), tienen la oportunidad de hacer muchos descubrimientos (por ejemplo, en 2011 descubrieron neutrinos superlumínicos).
The Big Bang Theory:
Aunque la serie está hecha para desconectar y reírte de un grupo de genios/frikis/cerebritos, también tiene una fuerte carga científica. En la serie hemos podido ver cameos de Neil deGrasse Tyson (astrofísico), George Smooth (Premio Nobel de física), Stephen Hawking, laboratorios reales, y pizarras blancas llenas de fórmulas propias de la física (están hechas por el profesor David Salzberg de UCLA).
Brian Cox:
Este ex-teclista de un grupo de rock, ingresó en la Universidad de Manchester a los 23 años para dar una vuelta a su vida y dedicarse a la física. Aunque parece el típico amigo para salir de fiesta, lleva desde 2005 presentando documentales científicos para la BBC como “Wonders of the Solar System” o “Wonders of the Universe” y lo hace de tal forma que convierte la ciencia en algo cotidiano y accesible. También ha salido como invitado en Doctor Who, presentador de Wonders of Life y La ciencia de Doctor Who. Actualmente es presentador de un programa que se llama “Human universe”.
House y Anatomía de Grey
Según Time, una encuesta realizada en 2008 a alumnos de medicina y enfermería (hecha por el instituto de bioética de la Universidad de Johns Hopkins) reveló que el 65% de los alumnos de enfermería y 76% de los estudiantes de medicina veían House. Además 80% de los futuros enfermeros y 73% de los futuros médicos también veían Anatomía de Grey. En este caso, no he encontrado ningún estudio que demuestre que estas series hayan influído a la gente a querer estudiar medicina/enfermería, pero sí que hay estudios sobre la ética que enseña y puede llegar a influír a estos futuros profesionales.
Los investigadores analizaron la serie entre 2005 y 2006 y encontraron 179 dilemmas bioéticos de 50 capítulos de House y Anatomía de Grey. 49 de ellos consistían en el simple hecho de pedir consentimiento por un tratamiento al paciente o sus familiares (anda que no pasaba de esto el Dr. House y los de Anatomía de grey también tela). También hay algunos casos que unos médicos de verdad nunca podrían hacer, como por ejemplo el caso de Dr. Izzie Stevens que deliberamente daña el corazón del paciente (su novio) para que se ponga peor y así, poder subir puestos en la lista de trasplantes. Por suerte, los alumnos de medicina son suficientemente inteligentes para saber que la mayoría de cosas que aparecen en ellas son ficticias o no deberían practicarse en la vida real.
Estas series también han influido a los espectadores que no son alumnos de medicina. Algunos capítulos nos han ayudado a cuidarnos mejor. Por ejemplo, en 2007 se realizó un estudio sobre la serie de “ER” para entender si los espectadores se auto-diagonisticaban/trataban. Encontraron que después de lanzar un capítulo de una adolescente con la presión alta y que le recomendaron a comer más verduras y frutas, los espectadores decían que eran más conscientes de las consecuencias de la hipertensión y se cuidaban mejor.
Breaking Bad
A pesar de mostrar tan libremente el proceso de cocinar meta-anfetamina en una serie de televisión, y de esperar que eso pudiera incrementar el uso o la venta de la droga, los datos muestran todo lo contrario. En Estados Unidos, tenían identificados 731,000 consumidores de la droga en 2006 y en 2012, bajó hasta 440.000. Además, se han impuesto muchas más medidas para prohibir la venta “ligera” de los ingredientes para cocinarlo y gracias a eso, están pillando a más personas.
También ha tenido un efecto sobre los narcotraficantes y es que desde la serie (dicen) que están más obsesionados por conseguir una droga más “pura”, igual que Walter White. ¡Y algunos hasta lo han teñido de azul!
Pero en definitiva, la serie nos ha mostrado a los espectadores los diferentes líos en qué se puede meter uno al consumir o cocinar esta droga tan dura. Precisamente por eso, el tabú ya no existe y la gente está un poco más informada de las consecuencias de la meta-anfetamina y parece que hay menos consumo o al menos, menos gente se siente atraída por ella.
¡Lástima que no hayan datos sobre si ha incrementado el interés por estudiar química! Sería interesante…
Law and Order
En el libro “Lawyers in your living room: Law on television” mencionan que en 2006 hicieron un estudio que reveló que cuánto más series de abogados veas, más confianza tendrás en abogados. En Estados Unidos se ve que hacen esta serie a todas horas en diferentes canales, por lo tanto es muy fácil ver un capítulo. También vieron que los que no confían en abogados, simplemente no ven series de abogados. Pero si los espectadores nunca han tenido contacto con abogados y ven estas series, confiarán más en ellos.
En definitiva, las series de TV, así como las películas o cualquier tipo de producto del entretenimiento y la cultura, puede tener efectos en nuestra sociedad y en nosotros mismos. ¡Pero tampoco hace falta ponerse paranoicos!