Bates Motel nos deja con una vertiginosa segunda temporada. ¿No la habéis visto? Entonces será mejor que leáis nuestro artículo sobre la Primera temporada o nuestro otro artículo sobre el estreno de la Segunda temporada. Aún así ya os puedo adelantar, en esta segunda temporada vais a conocer un Norman Bates que os va a dejar helados, mucho más enfermo, violento y que nos recuerda al gran Norman Bates interpretado por Anthony Perkins en el film de Hitchcock en el que se inspira la serie; Psicosis.
La última vez que hablamos de esta serie pudimos comentar algunos de los escalofriantes trailers de la serie. Ahora, podemos ver el “Behind the scenes” de uno de éstos, en el cual los personajes dan cuatro pinceladas de cómo iba a ser esta última temporada y, ¿Quién mejor que ellos para contárnoslo?
¡ALERTA SPOILER!
Como bien dicen, esta temporada tiene dos ejes principales; las dos familias del negocio de la droga que se pelean por quedarse con la porción más grande del pueblo y, obviamente, la relación entre Norman Bates (Freddie Highmore) y Norma Bates (Vera Farmiga), además de la evolución de la “enfermedad” de Norman.
La trama de las mafias le da mucho interés a ese pueblo digno de David Lynch, y enreda aún más los problemas de la familia Bates. Dylan (Max Thieriot) está en medio de los dos bandos y no sabe cómo salir airoso. Además, Dylan descubre algo traumático esta temporada…su padre es el hermano de Norma, que la violó cuando era pequeña. El pasado es un lastre que persigue a Norma desde la primera temporada, pero el pastel se ha descubierto en esta segunda, y esto ha hecho que la relación entre Dylan y su madre sea muy, muy mala, y termine con la huída de Dylan de la casa familiar. Nos gustan los tira-y-afloja entre Norma y Dylan pero, ahora que vuelven a estar unidos por todo lo que han pasado esta temporada…¿qué pasará? Seguro que nos sorprenden con alguna subtrama, ya que la principal y la que más nos gusta es la de Norman.
La relación entre Norman y su madre ha sido más intensa que nunca, y ha habido más enfrentamientos entre madre e hijo. Los momentos incómodos entre los dos ya estaban en la primera temporada, pero en esta todo es incluso más enfermizo. Algunas veces nos parece que un gesto va a ser algo más, y que rozará el incesto, otras es simplemente extraño y sobrepasan la relación maternal. Ese último beso que se dan en los labios en el bosque, por ejemplo. Esas caricias y esos abrazos. Repelús. En esta temporada también vemos a un Norman más rebelde, que desobedece a su madre algunas veces, sobretodo cuando va con su nueva amiga Cody Brennan (Paloma Kwiatkowski). Además, sabe que su madre le esconde secretos, y eso provoca tiranteces en la relación.
La evolución de Norman es radical en esta temporada y, sobre todo, en los últimos capítulos. Pasamos de ver a un adolescente con un episodio o dos de asesinato inconsciente…a tener un psicópata formado de pies a cabeza. Las apariciones de su madre (en su cabeza) ya van a ser algo normal a partir de ahora. Y lo mejor es que él ya ha descubierto lo que le pasa cuando se queda en blanco, y lo ha visto. Ahora no sólo Norma sabe que su hijo es un monstruo…ahora el propio Norman sabe lo que le pasó a su profesora y a su padre. Pero lo del polígrafo nos demuestra lo que ya sabemos (porque jugamos con ventaja, los que hemos visto la película en la que se basa esta precuela); está desdoblado perdido. En su fuero interno sabe que no ha sido él, sino su madre, esa doble identidad que aflora de vez en cuando en su interior y que mata a las personas (a partir de ahora, supongo que serán mujeres) que “ella” cree que lo merecen. Y, ojo al detalle de la última mirada que Norman lanza a la cámara…¿no os recuerda al final de la película de Psicosis? El joven Freddie Highmore es brillante en su papel del psicópata más famoso del cine clásico. Y claro está, se ha inspirado en el mejor.
Atención a este gracioso vídeo del actor visitando la casa de Psicosis.
Norma también ha sido mucho más compleja esta temporada. Sigue luchando para sacar el motel familiar adelante, y por eso se mete en negocios sucios sin ella saberlo. Norman y Dylan tampoco dejan de darle disgustos y, además, ella sigue huyendo de su pasado. Pero es la persona que es, y eso no lo puede cambiar. Creo que en esta temporada se ha dado cuenta de que no puede borrar quién es, sólo puede mirar hacia delante y proteger lo bueno de ella; Norman.
Otros dos personajes que me han gustado esta temporada han sido Emma (Olivia Cooke) y el Sheriff Romero (Nestor Carbonell). Emma ha tenido una subtrama para ella sola, y ha querido ayudar a la familia aunque Norma la ha dejado bastante al margen. Aún así, ella ha seguido al pie del cañón y…le hemos cogido cariño, oye. Y el Sheriff del pueblo ha sido crucial en estos capítulos. En la primera temporada era más bien un enemigo, sospechando siempre de los Bates, investigando y siguiéndoles la pista. Esta vez parece que se ha cambiado de bando y, aunque es el que pide que Norman pase por el polígrafo, les saca las castañas del fuego a todos los de la familia. Siempre. Además ¿se puede ver un poco de tensión sexual entre él y Norma? Ya lo veremos en la tercera temporada.
Hay muchos otros personajes secundarios en esta temporada, pero todos han sido un poco esporádicos. Se han quedado unos capítulos para luego irse. Como Bradley (Nicola Peltz), que parece que se ha ido de la ciudad ya para siempre.
De momento no tenemos ninguna pista de cómo será la tercera temporada. Lo único que sabemos es que va a ser, perdonadme la expresión, la hostia. Con un Norman como lo hemos querido hasta ahora, psicópata perdido. Y una madre que no es para menos. Estoy ansiosa.
