Durante casi un mes (del 10 de mayo al 3 de junio de 2018), la muestra Surge Madrid tiene como objetivo dar a conocer el trabajo de los creadores madrileños en varias salas alternativas de la capital. A pocos días de su cierre, estudié el programa y me dispuse a explorar la quinta edición a través de tres obras teatrales muy diferentes
Parada 1: El mundo según Burton
El jueves 24 de mayo le tocó el turno a El mundo según Burton, de Hernán Gené, que se representaba en El umbral de la primavera. Me senté en una silla alta e incómoda, perfecta para ver teatro, y me dejé llevar por Burton, el protagonista y único personaje de esta obra cómica de gran belleza.
Gené moldea el personaje de Burton a partir de la tradición del mimo y el clown, haciendo uso de su gran dominio del cuerpo y del gesto, y atrapa al espectador en un mundo paralelo, desfasado, casi fantástico. El personaje farfulla frases incomprensibles y emite sonidos que denotan su estado de ánimo. Se le escapan de vez en cuando, un “¿por qué?” y un “¡qué raro!”, a modo de suspiro, que resumen la experiencia del ser humano en este planeta.
Aunque el espectador se identifica con la experiencia de Burton, poco a poco, a medida que el personaje despierta, descubrimos objetos que parecen tener vida propia y se rebelan. Un micrófono que no funciona o que silencia sus palabras y gritos, la impotencia de Burton cuando ve que no será escuchado.
Un personaje tipo Charlot, que se acerca al cine mudo y derrocha ternura, incluso cuando nos enseña su faceta más gamberra. En definitiva, un espectáculo para echarse unas risotadas y reflexionar a partes iguales.
Podéis consultar la ficha del espectáculo aquí.
Parada 2: La lengua materna
El viernes 25 de mayo, una tarde lluviosa, puse rumbo a La cuarta pared, donde se representaba La lengua materna, de Daniel Martos. He de reconocer que, a pesar de su popularidad, nunca había pisado esta sala. En mi defensa diré que resido en Madrid desde febrero.
En La lengua materna, tres actrices llenan el amplio escenario y se ganan la complicidad de los espectadores en los tres primeros minutos de la representación. Se trata de una obra de corte experimental, metateatral, en que priman la conjunción de la vida y el teatro, la repetición de escenas y las reflexiones sobre el papel del autor, el actor y el teatro en la sociedad actual.
Asistimos al proceso de creación y a los ensayos de un espectáculo que se concentra en las relaciones materno-filiales, de fuerte carga feminista, en que las tres protagonistas exponen abiertamente su personalidad, sus miedos y sus más profundos deseos. Al fin y al cabo, es una obra terapéutica, que describe el dolor y trauma ante la pérdida de una madre y la posterior recuperación.
Quizá la única dificultad de La lengua materna sea la acumulación de diferentes temáticas, desde el teatro clásico hasta la reivindicación de los derechos y la dignidad de la mujer. No obstante, las tres actrices guían al espectador con mimo a través de este laberinto haciendo uso del humor. Ellas lo tienen claro: el teatro es importante.
Podéis ver la ficha del espectáculo aquí.
Parada 3: ¡Recuérdate, Krapp!
Mi última parada en este recorrido por la muestra Surge Madrid 2018 será en La usina, donde se representa ¡Recuérdate, Krapp!, obra de Colette Casas sobre un texto de Samuel Beckett.
Teatro evocador donde los haya, invita al espectador a sentir el dolor y las frustraciones de un viejo perdedor, perdido y desmemoriado, a empatizar con un viejo que dice tenerse miedo a sí mismo, que se enfrenta a sus recuerdos de juventud bajo una iluminación sumamente cuidada. Se nos presenta la imagen del viejo Krapp desnudo, como un niño recién nacido, que muestra sin tapujos su fragilidad.
¡Recuérdate, Krapp! es un espectáculo que depende de la música en directo, cuya escenografía y decorados funcionan por y para el movimiento de los personajes. Repleta de leitmotivs, la obra es un regalo para los sentidos y se desarrolla como si se tratara de una canción o partitura, mostrando así las idas y venidas en el tiempo, de los recuerdos y, en definitiva, el funcionamiento del cerebro humano. No obstante, la acumulación de elementos sonoros y visuales en escena puede resultar excesiva en algunos momentos, llegando a dispersar la atención de los espectadores.
¿Se enfrenta el viejo Krapp a su pasado? Esto queda a juicio del espectador.
Encontraréis la ficha del espectáculo aquí.
Una muestra más que recomendable
Mi recorrido intensivo por Surge Madrid 2018 termina aquí. No pretendo resumir toda la oferta teatral de la muestra en tres obras, pero se pueden hacer una idea.
El denominado “teatro alternativo” está vivo y al alcance de todos, aprovecha todo tipo de recursos, integra vídeo, música y escenografías multiusos e incluye referencias a la cultura popular, la televisión y acontecimientos y personajes conocidos por todos para establecer conexiones con el espectador. En él, coexisten la música de Frank Sinatra y de Guns N’ Roses, fragmentos de monólogos clásicos con canciones de Lola Flores y el réquiem de Mozart.
Los creadores madrileños demuestran que el teatro no es un hecho aislado. Se trata de un teatro multidisciplinar y tragicómico, lleno de vitalidad, que oscila continuamente entre la risa y el llanto, que nos desconcierta e invita a reírnos de la vida y la muerte, de todo, reutiliza y adapta mitos y arquetipos a nuestro presente, nos presenta disparates con mucho sentido, nos muestra el teatro desde dentro y reivindica su relevancia como instrumento para la reflexión.
Información práctica (¡visiten las salas alternativas madrileñas!)
Anímense a elegir una obra y a adentrarse en la muestra Surge Madrid 2018, que finaliza el domingo 3 de junio. Pueden consultar la programación y fechas a través de este enlace aquí.
Aún están a tiempo de ver El mundo según Burton y ¡Recuérdate, Krapp!
Si la muestra termina y no han tenido tiempo u oportunidad de asistir, echen un vistazo al programa igualmente y estén atentos a las compañías y obras que aparecen.
Estoy segura de que darán mucho que hablar y quizá puedan verlas en otra ocasión o durante las giras. En todo caso, no dejen de consultar la programación de las salas alternativas madrileñas que han acogido este evento anual y háganles una vista de vez en cuando. Es una aventura íntima y maravillosa.
* Artículo escrito por Susana Inés Pérez